Proyectos de Investigación: 2024
Angie Zea Zaravia; Adamary Yampi Mamani; Victor Hugo Rosas Iman; Yuri Felix Chavez Luque
Objetivo
Resumen:
Las actitudes hacia la violencia psicológica y sexual se forman desde la etapa escolar, y aunque el problema es multicausal; se pretende trabajar aspectos cognitivos-emocionales con la intención de modificar estas actitudes por medio de tres programas de intervención que reestructuren algunas creencias irracionales que se forman en la adolescencia tanto en varones como en mujeres, como la percepción a la tolerancia hacia la violencia; se propondrán tres programas de intervención desde el modelo centrado en soluciones, un modelo cognitivo conductual y un tercer programa holístico; el diseño que se pretende utilizar es un diseño factorial 2 x 2 en unos 100 escolares desde el tercer año de secundaria de instituciones educativas nacionales de zonas periféricas; se espera encontrar resultados positivos y significativos en los tres grupos experimentales a diferencia del grupo control y con ello reducir los niveles de violencia que se ve en nuestra población sobre todo en los adolescentes; el tiempo estimado a desarrollar los programas es de 8 meses para la aplicación
Palabras clave
reestructuración cognitiva, actitud hacia la violencia física y sexual, adolescentes
Problema central
En la sociedad actual, lamentablemente, los medios de comunicación nos muestran un preocupante incremento en los casos de violencia en sus diversas manifestaciones, incluyendo el grave problema de los feminicidios, que se han vuelto el pan de cada día en nuestras vidas. Estas trágicas estadísticas han ido en aumento con el paso del tiempo, lo que nos lleva a reflexionar sobre la urgencia de tomar medidas para combatir esta violencia de género. Según datos recopilados por el portal estadístico del Programa Nacional Aurora, en el año 2023 se reportaron un total de 170 casos con características de feminicidio. En este contexto alarmante, la ciudad de Arequipa se sitúa en el segundo lugar, con 26 casos (15.3%), mientras que Lima encabeza la lista con 27 casos (15.9%). Estas cifras nos invitan a la reflexión y nos recuerdan la importancia de trabajar juntos como sociedad para erradicar la violencia de género y promover un entorno seguro y respetuoso para todos. Díaz-Aguado y Carbajal (2011) mencionan que las intervenciones sobre distorsiones cognitivas se relacionan con la prevención de la violencia de género en contextos educativos, especialmente en la adolescencia por suponer una etapa crucial en el proceso de socialización y construcción de la identidad. Es por ello que la prevención permite fomentar una comprensión más empática y equitativa del género, así como reducir la incidencia en actitudes violentas y abusivas ya que en esta etapa de desarrollo, los adolescentes están moldeando sus creencias, actitudes y comportamientos. La originalidad de la presente investigación radica en la relevancia de aplicar estrategias adecuadas para reconstruir cognitivamente las creencias erróneas que los adolescentes tienen ante la violencia de género, lo que podría contribuir significativamente a la erradicación de estereotipos dañinos y a promover relaciones de género más equitativas y respetuosas. Con respecto a la magnitud del problema, en un estudio realizado por Quispe, Curro, Córdova, Pastor, Puza y Oyola (2018) se examinó la violencia dirigida hacia las mujeres y los casos de feminicidio. El objetivo era identificar la frecuencia de estos eventos por año y ubicación, así como evaluar el riesgo de que ocurran según la zona, el año, el mes, la relación entre víctima y agresor, el lugar donde sucede y el tipo de área. Tras analizar los datos recopilados entre 2009 y 2015, se llegó a la conclusión de que la violencia extrema contra las mujeres está en aumento. Además, se observó que el riesgo de feminicidio es mayor en el mes de noviembre, especialmente en áreas rurales y urbanas marginadas, en entornos no íntimos y cuando la agresión extrema no es perpetrada por la pareja actual o anterior de la víctima. Por lo que se destaca que existe un mayor riesgo de muerte por feminicidio, llegando a ser casi seis veces mayor, cuando la violencia extrema contra la mujer ocurre en estos escenarios. Por otro lado, Montenegro (2018) revela que la mayoría de las víctimas y agresores se encuentran en el rango de edad de 18 a 34 años, y que el 59.7% de los feminicidios ocurren dentro del hogar compartido por la pareja, siendo la asfixia o estrangulamiento la metodología más común de asesinato, representando el 30.1% de los casos. Además, identifica que el tipo más frecuente de feminicidio es el íntimo, donde el agresor es o fue la pareja de la víctima, constituyendo el 80% de los casos. El estudio destaca las prácticas culturales que subordinan a la mujer al hombre como una causa principal de este crimen y concluye que el feminicidio en Perú está en una tendencia ascendente, subrayando la urgencia de acciones estatales más firmes y continuas para su erradicación.
Hipótesis planteada
La reestructuración cognitiva en estudiantes de secundaria tiene un impacto positivo en la prevención de la violencia psicológica y sexual, al modificar patrones de pensamiento distorsionados y promover actitudes más saludables y respetuosas
Resultados esperados
Se espera obtener resultados positivos y que estos permitan a la larga la disminución de la violencia que se forma desde la adolescencia, sobre todo todo en poblaciones vulnerables
- 01 Artículos científicos publicados en revistas indizadas base Scopus, Web Of Science (*).
- 01 Tesis de pregrado o posgrado (*)
SE REASIGNARON COMO INDICADORES DE PRODUCTO POR NO SER DE RESPONSABILIDAD DEL IP, según comunicación de la Coordinación de la UGINV:
- 01 Publicación en web site el proyecto (*)
- 01 Participación en evento de difusión de resultados finales (*)
- 01 Publicación en Marketplace UNSA los resultados obtenidos (*)
Impactos esperados
Se espera que el programa tenga un impacto positivo en la población adolescente y que al replicarse en diferentes poblaciones se pueda prevenir la violencia psicológica y sexual